Luxemburgo, país más rico de la Unión Europea y con una de las rentas per cápita más altas de todo el mundo, pero qué frío se pasa a veces...
Por mucho que ya lleve quince años en el Gran Ducado, no me acostumbro... No me acostumbro ni al frío de su clima o el de sus gentes, ni a la lejanía de los míos...
Me pregunto en qué consiste la calidad de vida. ¿En contar con un puesto de trabajo muy bien pagado, mientras los tuyos, a miles de kilómetros de distancia, esperan una llamada, sentados junto a un teléfono? ¿O quizá en ver crecer los niños lejos de sus abuelos? ¿Tal vez en llenar vacíos mediante la compra de objetos sin fin? ¿O en intentar encontrar el punto positivo de ver nevar en pleno mes de abril (qué bonito se ve Luxemburgo cuando se viste de blanco!!!) mientras sabes que allá, en tu tierra, esa tierra que te viste obligada a dejar atrás en busca de "un mejor estatus económico", tus compatriotas descansan en playas de arena volcánica al calorcito de un sol de justicia o, mejor aún, del abrazo de familiares?
Sin duda, se paga un precio muy alto por alcanzar ese "estatus económico" que creemos necesario... Y me vuelvo a preguntar: ¿Es realmente necesario?
2 Comments
Yo pienso que moriremos sin nada, solo con recuerdos y lo vivido con los tuyos.
ResponderEliminarLo material es pasajero.
Te veo pronto por tus tierras, 😘😘😉
Comparto tu opinión, Cynthia. ¡Hasta pronto, linda!
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